M.Bernarda Marconetto (2)
RESUMEN
Se realizó en este trabajo, la identificación de muestras de carbón procedentes de tres eventos de combustión del sitio Alero Don Santiago. Los resultados del análisis antracológico, fueron cruzados con información etnobotánica y etnohistórica.
INTRODUCCIÓN
En el marco de los estudios Arqueobotánicos realizados en la región del valle de Piedra Parada, en la provincia del Chubut (Pérez de Micou 1988; 1991; Pérez de Micou et al.1992), en el presente trabajo, nos centraremos particularmente en los vestigios de combustión arqueológicos. Consideramos al combustible un recurso crítico para el asentamiento de grupos humanos, cuya disponibilidad especialmente en estas latitudes, es de vital importancia, y que ha recibido poca atención entre los trabajos arqueológicos que ponen énfasis en la relación hombre – recursos en el pasado.
El comportamiento humano respecto al aprovisionamiento, selección y consumo de leña, así como las particularidades de combustión de las distintas especies, se reflejan en el registro arqueológico e introducen variabilidad en la composición taxonómica de las muestras de carbón procedentes de fogones arqueológicos.
Esta investigación se apoya en análisis antracológicos , técnica que permite la identificación taxonómica del carbón arqueológico a partir de su estructura anatómica (Miller 1985; Smart y Hoffman 1988), y complementa los resultados obtenidos con información etnobotánica (Pérez de Micou 1991) y etnohistórica (Nacuzzi y Pérez de Micou 1983/85) disponible para el área. El objetivo puntual del trabajo, fue testear nuestra técnica, ver su potencial y grado de sesgo. Hay que destacar que la etnobotánica, así como las fuentes etnohistóricas, de las que pueden obtenerse datos sobre el manejo de recursos, aportaron un caudal de información cualitativa, de sumo interés en el momento de interpretar los resultados de los análisis antracológicos.
Con esta clase de vestigios (particularmente los procedentes de fogones), la cuantificación de resultados puede presentar demasiado sesgo como para que la investigación se base exclusivamente en ella. Este sesgo va a estar dado desde el proceso de combustión que afecta en forma diferencial a las distintas especies, la conservación diferencial de las especies en función de sus características y del contexto de depositación, hasta la recolección de muestras en el campo por los arqueólogos. De ahí la importancia, en este caso, de contar con el cuerpo de información que brindaron la etnobotánica y las fuentes etnohistóricas consultadas .
Las muestras analizadas proceden de tres eventos de combustión del sitio Alero Don Santiago, y corresponden a las capas 1, 2 y 4. El fechado disponible que pertenece a la capa 3, dio como resultado 1000 AP. Dado este marco temporal, no esperamos que cambios paleoambientales drásticos hayan afectado la composición florística del área, aunque si pensamos debió haberse producido variación por efecto antrópico (sobreexplotación de algunas leñosas, introducción de fauna y flora exótica).
MARCO GEOGRÁFICO
El alero Don Santiago se ubica en la llamada área de Piedra Parada, en el curso medio del río Chubut, al noroeste de esa provincia. Se distinguen aquí tres micro ambientes: las tierras altas, la costa (del río Chubut), y los cañadones que comunican las tierras altas y la costa. El alero, un sitio estratificado con arte rupestre, se encuentra en un mallín en el bajo del Michayal, zona donde se recogen las aguas de las tierras altas.
La región pertenece a la Provincia Fitogeográfica Patagónica, Distrito Occidental. Aquí la vegetación leñosa se presenta en forma de estepa arbustiva, predominando los arbustos bajos, rastreros, muy esparcidos dejando suelo desnudo (Cabrera 1976).
La baja diversidad de especies, constituye una ventaja metodológica, ya que la colección de referencia de especies leñosas con la que comparamos las muestras arqueológicas es acotada, facilitando la identificación.
METODOLOGÍA
La técnica antracológica, se basa en el hecho de que la estructura interna de la madera varía según las especies. La disposición, características y contenidos de las células que constituyen el xilema (tejido que forma el leño), son caracteres taxonómicos que pueden observarse en carbón arqueológico, permitiendo asignar el material a determinado taxón. Esto es posible, dado que la estructura anatómica de la madera se conserva a pesar de haber sido sometida a altas temperaturas, y al transcurso del tiempo.
La observación de caracteres diagnósticos, es posible a escala microscópica. Para nuestro análisis empleamos microscopio óptico para estudiar la colección de referencia; y lupa binocular y microscopio electrónico de barrido para la observación del material arqueológico.
Para lograr la identificación del carbón arqueológico, es imprescindible contar con una colección de referencia de especies leñosas presentes en el área de investigación, a fin de conocer la estructura anatómica de estas especies conocidas, con la que luego comparamos la estructura que presenta el material arqueológico.(3)
Al preparar nuestra colección de referencia, se tomaron muestras de tronco de las especies presentes en el área con la ayuda de informantes que emplean esos recursos en la actualidad, quienes aportaron información sobre las cualidades de combustión de cada especie recolectada. Luego en laboratorio se realizaron los cortes histológicos de los tres planos anatómicos que permiten observar todos los aspectos de la estructura interna de la madera (plano transversal, tangencial y radial).
Las muestras procesadas corresponden a 9 especies cuyos caracteres fueron descriptos considerando porosidad, disposición de vasos, parénquima, sistema de radios, tipo de radios e inclusiones en células (Ancibor y Pérez de Micou 1995). Siendo las especies que componen la colección:
Calafate (Berberis buxifolia), Barba de chivo (Caesalpinea gillessi), Algarrobillo (Prosopis denudans var. Patagónica), Monte guanaco (Anartrophyllum rigidum), Monte laguna o Chacay (Discaria sp.), Coliguay (Colliguaya intergerrima), Molle blanco (Schinus polymus), Molle colorado (Schinus marchandii), Sauce criollo (Salíx humboldtiana).
Procesamiento del material arqueológico
.Se analizaron tres muestras de carbón procedentes de distintos eventos de combustión. Las muestras fueron procesadas en función de las técnicas de recupero empleadas en el campo, y corresponden a:
Muestra 7
Sondeo
Capa 1
N = 90 fragmentos de carbón
Muestra 27
Sondeo 2
Capa 2
N = 250 fragmentos de carbón
Muestra 37
Sondeo
Capa 4
N = 66 fragmentos de carbón
(* los ejemplares de esta muestra son sensiblemente más grandes que los fragmentos de las muestras anteriores.)
Los fragmentos de carbón fueron observados con lupa binocular, y en función de la variabilidad que presentaron se seleccionó una sub muestra que fue identificada y fotografiada utilizando microscopio de barrido. Se observaron solo los cortes transversales, ya que en la colección de referencia, este tipo de corte mostró suficientes caracteres diagnósticos entre las especies del área.
RESULTADOS
Muestra 7
Capa 1 N= 90 fragmentos de carbón obs.en MEB: 10% (4)
f. 1987 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1992 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1993 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1988 |
Schinus sp. Molle |
f. 1990 |
Schinus sp. Molle |
f. 1991/1994 |
Schinus sp. Molle |
f. 1985 |
Prosopis denudans Algarrobillo |
f. 1986 |
Indeterminada |
f. 1989 |
Indeterminada |
Muestra 27
Capa 2 N= 250 fragmentos de carbón obs.en MEB: 3.6%
f. 1346 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1349 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1350 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1353 |
Discaria sp. Chacay o Monte laguna |
f. 1345 |
Schinus sp. Molle |
f. 1354 |
Schinus sp. Molle |
f. 1347 |
Prosopis denudans Algarrobillo |
f. 1348 |
Prosopis denudans Algarrobillo |
f. 1352 |
Prosopis denudans Algarrobillo |
f. 1351 |
Indeterminada |
Muestra 37
Capa 4 N= 66 fragmentos de carbón obs.en MEB: 15.5 %
f. 1996 |
Berberis buxifolia Calafate |
f. 1997 |
Berberis buxifolia Calafate |
f. 2003 |
Berberis buxifolia Calafate |
f. 2004 |
Schinus sp. Molle |
f. 1999 |
Schinus sp. Molle |
f. 2000 |
Schinus sp. Molle |
f. 1998 |
Schinus sp. Molle |
f. 2001 |
Similar Nothofagus |
f. 2002 |
Indeterminada |
f. 1995 |
Indeterminada |
Características de las especies identificadas en el Alero Don Santiago
En base a la información proporcionada por informantes de la zona del valle de Piedra Parada, que emplean los recursos combustibles del área en la actualidad, y a datos etnohistóricos, presentamos una reseña sobre algunas características de los taxones identificados en las muestras analizadas.
Discaria sp. Monte laguna o Chacay:
Especie arbustiva que crece en los cañadones, en la actualidad hay pocos ejemplares en la zona, por lo que sorprende su alta frecuencia en el registro arqueológico. Su leña es muy dura, y de buena combustión, es de encendido fácil, tiene alto poder calórico, y la duración del leño dentro del fogón es prolongada.
El Chacay es considerado un excelente combustible por los pobladores de la región, y las fuentes etnohistóricas señalan el uso de gruesas raíces de esta especie como combustible. El uso de las raíces, incide negativamente en la regeneración de los ejemplares. Este tipo de consumo, y las propiedades de combustión apreciadas por los lugareños dieron como resultado la sobreexplotación de esta especie.
Schinus sp.
Molle:En el valle de Piedra Parada, encontramos molle blanco Schinus polygamus que crece en las zonas altas entre 1000 y 1500 msnm, y molle colorado Schinus marchandii en arenales y zonas más templadas. Esta leña es muy apreciada, compacta y difícil de partir, de larga duración en el fogón y alto poder calórico. Según los informantes, esta especie no debe emplearse sola sino combinada con otros combustibles de menor valor calórico y de encendido fácil. Esto se observó en los tres eventos de combustión analizados, donde Schinus aparece recurrentemente y asociado a otras especies (Discaria en las capas 1 y 2, y Berberis en la capa 4).
Según Roig 1998:91 estos pequeños árboles formaban un estrato forestal bajo actualmente desaparecido o del que sólo quedan restos y que en otros tiempos habrían dado una fisonomía muy distinta a numerosas partes de la Patagonia.. Soriano 1956 cree que el Schinus fue muy abundante en el pasado formando verdaderos bosquecillos. Las especies de molle quemadas rebrotan del cuello y dado su lento crecimiento y los fuegos repetidos dificilmente alcanzan el porte arbóreo quedando reducidos a arbustos. Han sufrido permanente eliminación debido a la excelencia de su madera para el fuego. Las especies de Colliguaja (coliguay) y Schinus conviven frecuentemente. La explicación puede darse por la común reacción al fuego ya que las dos rebrotan de la cepa y se elimina la competencia de otros arbustos menos resistentes. Es interesante observar que a pesar de estar disponibles en las mismas zonas, el molle aparece recurrentemente en las muestras analizadas y no así el coliguay. Según los informantes esta leña es buena, pero tiene humo fuerte y espeso "larga como una grasa que cae al fuego y hace mucho humo" y se hace ceniza en seguida. La ausencia de coliguay en las muestras podría estar mostrando un comportamiento selectivo con respecto a las distintas propiedades de combustión de las especies.
Berberis sp. Calafate
Este arbusto crece en los cañadones, se utiliza como combustible el tallo enterrado, ya que la parte aérea de la planta tiene ramas muy delgadas que pueden emplearse como iniciadores. Se cava alrededor de la planta y se arrancan los tallos, o se los parte golpeándoles. La leña así obtenida es dura y se mantiene mucho encendida. En la zona existe otra variedad de Berberis cuyo fruto es comestible.
Prosopis denudans Algarrobillo
Es un arbusto de 1 a 2 metros de porte, conocido también como algarrobo patagónico o algarrobo de chancho. Es una especie adaptada a la estepa arbustiva con inviernos muy fríos (Castro 1994). En el valle de Piedra Parada crece en la costa, se lo utiliza como combustible considerándolo buena leña, aunque prefieren el molle que "se hace carbón, el Algarrobillo se termina en ceniza". Esta característica de combustión puede sub representar esta especie en el registro arqueológico. Al igual que al Molle, por ser muy duro se lo parte a golpes, y tiene leña enterrada igual que el calafate.
Nothofagus sp.
Esta especie no pertenece a la estepa arbustiva, sino al distrito subandino. La distancia del sitio a la que crece Nothofagus, está muy por fuera de la distancia esperada para la recolección de combustible.
En la capa 4 aparece un espécimen que presenta semejanza anatómica con esta especie. Según las fuentes algunas especies del distrito subandino eran utilizadas para la confección de manufacturas, por lo que podríamos esperar que la presencia de este taxón en la muestra, responda a parte de un artefacto descartado en el fogón.
CONCLUSIÓN
Los análisis antracológicos ofrecen un listado de taxones que han sido empleados en un evento de combustión. Al interpretar estos resultados, hay que tener presentes una serie de consideraciones; que la muestra responde a la selección de especies por parte del hombre, por lo que es necesario ser cuidadoso con las inferencias sobre paleoambiente ya que si bien las especies identificadas en fogones arqueológicos estuvieron presentes en el área durante el pasado, no debe esperarse que la muestra analizada represente necesariamente la composición y frecuencia de especies leñosas en ese momento.
La variabilidad en la composición taxonómica de la muestra puede estar dada por factores antrópicos, partiendo del supuesto del conocimiento empírico de las propiedades de combustión de cada especie por parte del grupo que las utiliza, podemos esperar que haya selección de determinados taxones para diversos usos; el hombre puede alterar la composición florística de un área por sobreexplotación afectando la disponibilidad de algunas especies; o proteger algunas de ellas, en el caso de que se consuman sus frutos, estas especies posiblemente no sean empleadas como leña.
Otro factor de variabilidad está dado por la forma en que afecta el fuego a las distintas especies durante el proceso de combustión.
En relación a la cuantificación de resultados, como se mencionó anteriormente, en antracología presenta problemas. Algunos autores (Rolando y Riser 1992) consideran que resulta azaroso sacar conclusiones de tipo cuantitativo, tanto en lo relativo a información paleoambiental, como al interpretar la composición taxonómica de un fogón, ya que mayor número de fragmentos no implica mayor presencia de una especie, sino que esto está en relación a la mayor o menor fragmentación de los carbones, o con el mayor o menor porcentaje de residuos sólidos que se desprenden de la combustión.
El Alero Don Santiago, presenta cierta variabilidad en la composición taxonómica de sus muestras que puede entenderse complementando los resultados de la identificación con información etnobotánica y la revisión de fuentes. En relación a la recopilación de esta información, los datos etnobotánicos prácticamente acompañan la tarea de formar la colección de refencia de las especies del área, ya que es muy conveniente recolectar las especies con algún informante del lugar que utilice en la actualidad combustible de la zona, y luego chequear y completar estos datos con otros informantes. En cuanto a la revisión de fuentes, en el caso de este trabajo, facilitó la tarea el hecho de que existiera ya una revisión de fuentes orientada a recavar datos sobre consumo de vegetales en el área realizada por Nacuzzi y Pérez de Micou (1983/85).
Otro punto a considerar para trabajos futuros, es diseñar fogones experimentales que permitan monitorear el grado en que el proceso de combustión afecta a distintas especies, fragmentación, reducción a cenizas, representatividad de las muestras con el objeto de afinar la cuantificación de resultados.
BIBLIOGRAFÍA
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Soriano, Alberto
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NOTAS
1 El presente trabajo fue presentado en las III Jornadas de Arqueología de la Patagonia. S.C. de Bariloche, mayo 1996.
2 Universidad Nacional de Córdoba, Museo de Antropología.
Correo electrónico: bmarconetto@hotmail.com
3 La colección comparativa de leñas del valle de Piedra Parada, se encuentra en la xiloteca de la Catedra de Anatomía Vegetal, FCEyN, UBA.
4 El numero corresponde al asignado a la fotografía de cada muestra del Servicio de Microscopía Electrónica del CITEFA.
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